martes, 27 de diciembre de 2016

Reflexiones históricas; “Cuito Cuanavale”.

Considerada la proeza militar de la Revolución Cubana, y una de las batallas más trascendentales después de los combates de la II Guerra Mundial, angolanos y cubanos derrotaron en toda la extensión a los invasores sudafricanos y reafirmaron la soberanía de esta nación africana.
 
Estoy convencido de que muchos de los que están leyendo este escrito, no saben un carajo de lo que es y mucho menos saber dónde queda Cuito Cuanavale, pero tranquilos, acá les procedo a explicar. Cuito Cuanavale está ubicado en un rincón de Angola, en dirección sureste, a más de 1,000 kilómetros de Luanda, Capital de Angola. Este poblado se asienta en la confluencia de los ríos Cuito y Cuanavale, por ellos es que se toma este nombre para llamar a dicho conflicto bélico, es un lugar rodeado de aldeas matizadas por sus típicas construcciones de barro y guano. Su vegetación es semidesértica y está formada por arbustos espinosos y árboles de mediana altura.
 
 
Soldados Cubanos en Angola


Esta batalla marcó el principio del fin del dominio de la minoría en el sur de África, el desmantelamiento del sistema de apartheid y la liberación total del continente de la ocupación europea. En ese remoto pueblo en el sur de Angola en marzo de 1988, el ejército sudafricano del apartheid fue derrotado por una alianza panafricanista que incluyó decenas de miles de soldados cubanos. Su victoria obligó a los gobernantes racistas de Sudáfrica a comenzar las negociaciones que llevaron al levantamiento de la proscripción de las organizaciones anti-apartheid, la liberación de Nelson Mandela, la independencia de Namibia, y en última instancia la libertad de Sudáfrica.
En Julio de 1987, el ejército angolano (FAPLA) lanzó una ofensiva de gran envergadura en el sureste de Angola contra las fuerzas de Jonas Savimbi. Pero al ver que la ofensiva estaba teniendo éxito, las Fuerzas Armadas Sudafricanas (SADF) que controlaban las partes más meridionales del suroeste de Angola, intervinieron en el sureste. Para principios de noviembre las SADF habían acorralado a las mejores unidades de combate de Angola en el poblado de Cuito Cuanavale y estaban preparándose para aniquilarlas.
 
 
 
Luego de la ofensiva final
 
Luego de esta situación, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas exigió a las SADF, que se retiraran incondicionalmente de Angola, pero la administración del Presidente Ronald Reagan se aseguró de que esta exigencia fuera una resolución sin mayor transcendencia[1].
El Secretario de Estado Adjunto para los Asuntos Africanos de Estados Unidos, Chester Crocker[2], le informo al Embajador de Sudáfrica en Estados Unidos: "la resolución no reclama sanciones y no plantea ninguna asistencia para Angola. Esto no es por casualidad sino el resultado de nuestros esfuerzos para mantener la resolución dentro de determinados límites". Mientras las SADF aniquilaban a las unidades elites de las FAPLA.
 
 
Mapa de la confluencia entre ambos ríos
 
El 15 de noviembre de 1987, el Presidente Cubano Fidel Castro había decidido enviar más tropas y armas a Angola, sus mejores aviones con sus experimentados pilotos, sus armas antiáereas más sofisticadas y sus tanques más modernos en dicho momento. La intención de Castro no era solo defender a Cuito, era sacar a las SADF de Angola de una vez y para siempre. Años más tarde, el Comandante revelo que Cuba pararía la embestida sudafricana y luego atacaría en otra dirección, como el boxeador que con la mano izquierda lo mantiene y con la derecha lo golpea[3].
Aviones cubanos y 1,500 soldados[4] reforzaron a los angolanos y Cuito no cayo. El 23 de marzo de 1988 los sudafricanos lanzaron su último asalto de mayor envergadura contra Cuito. Tal como lo describe el Coronel Jan Breytenbach, la embestida sudafricana, fue frenada abrupta y definitivamente por las fuerzas conjuntas cubanas-angolanas[5].
Los servicios de inteligencia gringos explicaron que los sudafricanos se retiraban porque estaban impresionados por la rapidez y la fuerza del avance cubano y porque consideraban que un combate de mayor envergadura hubiera acarreado grandes riesgos.
El 27 de junio de 1988, MIG cubanos atacaron posiciones de las SADF cerca de la presa de Calueque, 11 kilómetros al norte de la frontera de Namibia. La CIA informó que: "la manera exitosa con que Cuba ha utilizado su fuerza aérea y la aparente debilidad de las defensas antiaéreas de Pretoria", subrayaban el hecho de que La Habana había logrado la superioridad aérea en el sur de Angola y en el norte de Namibia.
A pesar de todos los esfuerzos de Washington para impedirlo. Cuba cambio el curso de la historia de África Austral. Hasta Crocker reconoció el papel de Cuba cuando le dijo en un cable a Shultz el 25 de agosto de 1988: "descubrí lo que piensan los cubanos es una forma de arte. Están preparados tanto para la guerra como para la paz. Hemos sido testigos de un gran refinamiento táctico y de una verdadera creatividad en la mesa de negociaciones. Esto tiene como telón de fondo las fulminaciones de Castro y el despliegue sin precedentes de sus soldados en el terreno".
La hazaña de los cubanos en el campo de batalla y su virtuosidad en la mesa de negociaciones fueron decisivas para obligar a Sudáfrica a aceptar la independencia de Namibia. Su exitosa defensa de Cuito fue el preludio de una campaña que obligo a la SADF a salir de Angola. Esta victoria repercutió más allá de Namibia.
 
Comandante Arnaldo Ochoa, héroe de Angola
Posteriormente ejecutado por vinculaciones con el narcotráfico internacional
 
En un discurso ante decenas de miles de personas en la ciudad cubana de Matanzas en julio de 1991, Nelson Mandela elogió la contribución de Cuba a la liberación africana, declarando:
“Durante mucho tiempo hemos querido visitar su país y expresar los muchos sentimientos que tenemos acerca de la revolución cubana, sobre el papel de Cuba en África, el sur de África y el mundo. El pueblo cubano tienen un lugar especial en los corazones de la gente de África. Los internacionalistas cubanos han hecho una contribución a la independencia africana, la libertad y la justicia, sin precedentes por sus principios y desinterés… Su aplastante derrota del ejército racista en Cuito Cuanavale fue una victoria para toda África!”
 
Hoy en día, los visitantes de Parque de la Libertad en Pretoria, Sudáfrica observan en la lista de los mártires antiapartheid los nombres de los más de dos mil cubanos que perdieron la vida en Angola.
--

Máximo Peña De León
@MaximoPenaLeon
@PenaYunesLegal

 




[1] Durante la próxima década, los gobernantes racistas sudafricanos intentaron desestabilizar a Angola, principalmente a través de su apoyo a UNITA (Unión Nacional para la Independencia Total de Angola). El ejército sudafricano y la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos armaron, entrenaron y coordinaron la campaña de terror de UNITA contra el pueblo angoleño. Cada vez que el ejército angoleño, con la asistencia de asesores soviéticos y cubanos, golpeó contra la UNITA, el SADF respondió con ataques aéreos e invasiones terrestres para proteger a sus mercenarios angoleños. Como resultado, dos provincias del sur de Angola fueron ocupadas efectivamente por el SADF, ampliando así el sistema del apartheid de África del Sur a través de África del Sudoeste hacia Angola.


[2] Secretario de Estado a la Embajada EE.UU. en Pretoria, 5 de diciembre de 1987; Freedom of Information Act.


[3] Transcripción sobre la Reunión de Fidel con la delegación de políticos de África del Sur (Camp Slovo), Centro de Información de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.


[4] Entre dichos soldados servía como Oficial del Ejército Cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, hoy el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba (Canciller).


[5] Poderosas columnas cubanas avanzaban hacia el suroeste de Angola hacia la frontera de Namibia.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario